Se habla mucho de cómo la inteligencia artificial nos va a quitar el trabajo a los pobres humanos.
Y si nuestros amos robots han estado prestando atención, han oído a muchos líderes tecnológicos y pensadores repetir la idea de que la IA no te va a quitar el trabajo, sino que lo hará alguien que sepa cómo utilizarla.
Esta idea ha vuelto a la palestra recientemente, después de que Sam Altman, CEO de OpenAI, afirmara afirmado que los estudiantes a los que les preocupe la posibilidad de que la IA les deje atrás deberían redoblar sus esfuerzos para aprender a utilizar la tecnología, un planteamiento que, según él, le funcionó con la programación informática.
«Estoy seguro de que habrá muchos más puestos de trabajo y también de que muchos de ellos serán algo diferentes de los que conocemos hoy, pero parece que nunca nos quedaremos sin cosas que hacer», ha defendido Altman durante una entrevista con el CEO de Indeed, Chris Hyams, publicada el pasado jueves.
La optimista opinión de Sam Altman difiere de la ofrecida días antes por el famoso inversor de Silicon Valley, Vinod Khosla, cofundador de Sun Microsystems, quien advertía de que la inteligencia artificial podría llegar a asumir en el futuro el 80% del trabajo del 80% de los empleos. También dijo que, a diferencia de lo que ocurrió con las olas tecnológicas anteriores, los trabajadores no podrían desarrollar más sus habilidades para protegerse contra la pérdida de puestos de trabajo.
Sin embargo, a pesar de toda la preocupación sobre cómo la IA podría poner en jaque al mercado laboral, desde ejecutivos hasta estudiantes parecen seguir adelante con lo que Sam Altman recomienda: profundizar en la tecnología.
Sam Altman señalaba en la mencionada entrevista que la programación informática ya era popular cuando él estaba estudiando, pero no tenía «nada que ver» con lo que es hoy. «La gente decía las mismas cosas —muchas de las mismas— que dicen ahora sobre la inteligencia artificial», subrayó.
Los humanos tenemos muchas habilidades
Otro punto a favor del bando de los que creen que no van a perder su empleo procede de un nuevo estudio de Indeed en el que se identifican más de 2.800 habilidades laborales. Los investigadores del portal de empleo, utilizando largas preguntas con una herramienta de IA generativa, determinaron que ninguna de esas habilidades tenía «muchas probabilidades» de ser sustituida por GenAI.
Svenja Gudell, economista jefe de Indeed, explica a BI que la llamada mejora de las competencias puede ofrecer grandes beneficios, pero no es «mágica». Según ella, algunas personas de todas formas podrían perder sus empleos debido a los avances tecnológicos.
«Tendrán que aprender a utilizar estas herramientas. Y no será fácil», concede Gudell.
Pero «al menos con la tecnología que estamos presenciando en la actualidad, no se trata del tipo de automatización de la inteligencia artificial en la que robots inteligentes trabajan en los almacenes», explica.
Khosla, cofundador de Sun Microsystems e inversor de OpenAI, advirtió en el pasado de que los robots bípedos eran uno de los avances que pondrían en peligro la capacidad de los humanos para conservar sus puestos de trabajo.
Antes de que los robots aparezcan para abastecer las estanterías de las tiendas, es más probable que vengan a por los trabajos de oficina.
Por ahora, según Gudell, de Indeed, se ha producido un aumento de la demanda y de la remuneración de las personas versadas en aspectos de la IA.
«Si eres un ingeniero de prompts o si eres un ingeniero de aprendizaje automático que realmente puede programar algunas de estas cosas vas a conseguir un aumento salarial muy significativo», dice Gudell.
Una de las profesiones que parece correr más riesgo de ser absorbida por la IA es la de programador. Sin embargo, como ya ha publicado BI, algunos ingenieros de software experimentados afirman que la IA les ayudará a hacer más cosas sin quitarles su puesto, porque su trabajo va mucho más allá de la programación.
Los niños siguen aprendiendo a programar
Parece que la preocupación por elocalipsis laboral de la IA no está disuadiendo a algunas personas de dedicarse a fondo a la tecnología, como aconseja Altman.
Edward Kim es vicepresidente de educación y formación de Code Ninjas. La empresa enseña ingeniería de software a niños de entre 5 y 14 años a través de clases presenciales en Estados Unidos, Canadá y Reino Unido.
Según explica a BI, la empresa está experimentando una fuerte demanda de personas que desean abrir sucursales de la franquicia. En un plazo de dos años, la empresa prevé añadir 200 locales a los más de 350 que tiene en la actualidad.
Los programadores profesionales con los que habla Kim ya utilizan la IA para hacer cosas como generar código para principiantes. Pero estos ingenieros no están tan preocupados por la posibilidad de perder su trabajo, afirma, porque los programadores trabajan para personas que necesitan que hagan algo más que escribir línea tras línea en diversos lenguajes de programación.
Los empleadores necesitan «a alguien con un contexto real para adaptarlo correctamente, para hacerlo aplicable a algo del mundo real, para que pueda ser útil», dice Kim (también conocido como «ser humano»).
Hace un par de años, los alumnos de Code Ninjas tardaban unos 18 meses en dominar un nuevo lenguaje. Ahora tardan entre seis y doce meses.
«Esto demuestra que los niños que se están formando tienen cada vez más sed de este tipo de conocimientos», afirma Kim.
Es un deseo de aprender que Altman indicó que ya mostraba cuando era estudiante. Dijo que la programación informática había sido algo muy positivo.
«Ha hecho desaparecer ciertos tipos de trabajos», dijo Altman. Aun así, «ha hecho que surjan cosas nuevas y también nos ha dado la capacidad de hacer muchas otras más».