Uno de cada tres trabajadores ya utiliza la IA, según los expertos, pero estas son las funciones para las que nunca deberías darles un uso profesional

Uno de cada tres trabajadores ya utiliza la IA, según los expertos, pero estas son las funciones para las que nunca deberías darles un uso profesional

Según un nuevo estudio, 1 de cada 3 trabajadores ya utiliza la inteligencia artificial para ayudarse en sus tareas profesionales. O lo que viene a ser lo mismo, un 32% de ellos utiliza herramientas como ChatGPT de manera habitual. Un dato que pone una vez más de manifiesto la popularidad de esta tecnología que, pese a todo, todavía despierta poca confianza en algunos expertos.

Por si fuera poco, tampoco faltan quienes advierten que las últimas versiones de IA serán difíciles de mejorar. Es decir, que su desarrollo está poco menos que estancado, tal y como parece que apuntan trabajadores de la propia empresa OpenAI, el principal referente del sector a día de hoy. Con todo, existen algunas funciones para las que la IA no debería utilizarse aún.

Muchos trabajadores se ayudan de la IA

Tal y como revela Infojobs, 1 de cada 3 trabajadores ya emplea la IA en su trabajo, pero también es cierto que no todo el mundo ha acogida este avance tecnológico con el mismo entusiasmo. El perfil que más lo ha hecho está claro: menor de 35 años (un 46% tiene entre 25 y 34 años, y un 62% incluso es menor de esa edad), habitualmente hombre y, en muchos casos, teletrabajador.

¿Y para qué se emplea sobre todo la inteligencia artificial? Atendiendo a los resultados del estudio, lo más utilizado es su traducción automática (un 58% de los casos), seguido de los propios chatbots (37%) y su asistente de voz (27%). Además, el 29% de los encuestados también admite que, aunque se ayuda de una forma u otra de la IA, su empresa no tiene ni ida de ello. 

Tareas en las que nunca deberías utilizar aún la IA

No obstante, y a pesar de que este considerable éxito, muchos son los expertos que ponen de manifiesto las limitaciones de la IA, algo que aconsejan no olvidar, tampoco a nivel profesional. Empezando por aquellas cuestiones relacionadas con la justicia o incluso la resolución de conflictos. En este sentido, conviene recordar que la IA carece de empatía y comprensión humana.

Lo mismo que sucede con las terapias psicológicas y el cada vez más importante cuidado emocional. La explicación que dan los expertos es sencilla: sobre todo en contextos clínicos, esta tecnología no dispone de las aptitudes básicas para sustituir el criterio humano a la hora de atender a cuestión psicológicas. Puede servir de apoyo, quizá, pero nada más.

¿Y qué sucede a nivel creativo? Pues que los especialistas también son aún escépticos. Por mucho que la IA sea capaz de crear textos o imágenes de manera convincente, hoy por hoy parece incapaz de sustituir la creatividad y el ingenio que pueden aportar la mayoría de profesionales. Algo en lo que se han mostrado de acuerdo gente como Stephen King o Steven Spielberg

En este sentido, no faltan quienes simplemente invitan a hacer la siguiente pregunta antes de sustituir las facultades humanas por las de la inteligencia artificial. ¿Hasta qué punto tendrías interés tú mismo en disfrutar de un artículo o una película realizada íntegramente con esta tecnología? Una cuestión, sin duda, que seguirá dando mucho de qué hablar en los próximos años.