‘Star Wars’: Los 15 mejores momentos de las precuelas

Aunque George Lucas arrancó Star Wars con la historia a medias, dos décadas después pudo retroceder hasta el principio. El director quería narrar todo el ascenso y caída del joven Anakin Skywalker hasta convertirse en Darth Vader. Y para ello desarrolló una tecnología puramente digital que le permitiera abordar su universo galáctico tal y como él lo imaginaba. El momento llegó en 1999 con Star Wars: Ep. I – La amenaza fantasma. Fue ahí cuando Lucas devolvió a sus acólitos al cine con una promesa que hoy se entiende mucho mejor que antes.

Porque, probablemente, por toda la ilusión generada y por el tiempo que había pasado desde El Retorno del Jedi, no había escenario posible en el que no decepcionaran. Las críticas a las precuelas de Star Wars fueron muy duras por parte de los fans originales al tiempo que los niños de los 90 y los 2000 descubrían un universo único. Ahora esos niños han crecido y son los que han revalorizado esas tres películas. Porque, en realidad, cuentan con momentos memorables.

Los mejores momentos de las precuelas de Star Wars

Carrera de vainas

En La amenaza fantasma, el público conoció a un jovencísimo Anakin Skywalker. Un niño muy especial al que el Maestro Qui-Gon Jinn pronto percibió como el Elegido. Vivía como esclavo en Tatooine y, para comprar su libertad, el Jedi apostó con su dueño, Watto, en una carrera de vainas en la que el propio Anakin competía. De esta manera, Lucas sorprendía mostrando en Star Wars nada menos que una carrera llena de adrenalina al estilo Ben-Hur futurista, como si fuese una película de Fórmula 1. Un momento ya icónico de Star Wars que sigue siendo tremendamente emocionante visto hoy en día.

Revelación de la identidad de Padme

También en La amenaza fantasma, la Reina Amidala, a quien Qui-Gon y Obi-Wan Kenobi debían escoltar, decidió ocultar su identidad. El personaje de Natalie Portman le pedía a una de sus sirvientas que se hiciera pasar por ella, que mientras tanto haría las labores de súbdita. Así es como pudo conocer a Anakin y establecer un fuerte vínculo con él. Además, se protegía en caso de un intento de atentado por parte de las tropas de la Federación de Comercio. Cuando al fin se descubre el pastel, no por predecible el giro de guion es menos acertado.

Pelea con Darth Maul

Pero si hay un momento cumbre en La amenaza fantasma es la brutal batalla de espadas láser entre Qui-Gon Jinn y su discípulo Obi-Wan Kenobi contra el malvado Darth Maul. Este perverso villano del Lado Oscuro de la Fuerza sorprendió al mundo con nada menos que un sable láser doble. Bajo la batuta del inmenso John Williams, sonó por primera vez el ya legendario tema Duel of the Fates. En la lucha se vio una coreografía muy distinta a las vistas en la trilogía original de Star Wars. Mucho más dinámica y espectacular. Y con un final desgarrador: la muerte del personaje de Liam NeesonObi-Wan le vengaba instantes después cortando al antagonista por la mitad.

Pelea de Obi-Wan vs. Jango Fett

Star Wars: Ep. II – El ataque de los clones se alejaba varios años en el futuro. Anakin Skywalker ya era prácticamente un adulto y uno de los mejores guerreros Jedi de toda la Orden. En el filme, su maestro, Obi-Wan Kenobi, viajaba hasta Kamino para investigar la creación de todo un ejército de clones para la República. Allí se encontraba con el hombre que dio su material genético para esos clones, el cazarrecompensas Jango Fett. Este trabajaba en realidad para el Conde Dooku y los Separatistas, lo que desemboca en una feroz lucha bajo la lluvia entre ambos.

Ataque a los Tusken

Por su lado, en El ataque de los clonesAnakin ha comenzado a tener unas extrañas pesadillas premonitorias en las que su madre moría. Por eso viaja a Tatooine con Padme y allí descubre que su progenitora ha sido secuestrada por los Tusken. Furioso, va a rescatarla pero únicamente llega para verla morir. Devastado, la ira y el sufrimiento se apoderan de él, que ataca a toda la aldea. Mujeres y niños incluidos. Son sus primeros pasos hacia el Lado Oscuro, hacia su conversión en Darth Vader.

Batalla de Geonosis

Al final de El ataque de los clonesPadmeAnakin Obi-Wan son rehenes de los Separatistas y del Conde Dooku, que les mete en una arena al estilo del Coliseo Romano para que luchen contra unas bestias y mueran. Pero por fortuna para ellos, el ejército de clones de la República llega hasta Geonosis para recatarlos, liderados por multitud de Jedi. Se desata sí una épica batalla en la arena en la que las fuerzas del bien y del mal luchan a muerte. Entre los momentos más notables, la decapitación de Jango Fett a manos del Maestro Windu.

Pelea de Yoda vs. Conde Dooku

Durante ese ataque a Geonosis, el Conde Dooku escapa y los protagonistas de las precuelas de Star Wars van tras él. El ímpetu de Anakin hace que ni él ni Obi-Wan sean rivales para el villano. Pero sí lo es Yoda, que llega a tiempo para un nuevo duelo de espadas láser muy igualado y, aunque breve, de lo más entretenido. Pese a los intentos del anciano verde, Dooku consigue escapar.

Boda de Anakin y Padme

El ataque de los clones concluye con uno de los momentos más románticos de toda la saga Star Wars. Los artificiales diálogos de George Lucas -nunca fue su punto fuerte- hicieron que en la película el desarrollo del romance de Anakin Padme fuera terrible. Pero gracias a la preciosa banda sonora de John Williams, con Across the Stars como tema principal, todo llegaba a su culmen con una boda secreta en Naboo bajo la atenta mirada de R2-D2 y C3PO. La luz en mitad del desastre con la guerra recién iniciada.

Rescate a Palpatine

Ya en Star Wars: Ep. III – La venganza de los Sith, las precuelas realmente crecían hasta lo más alto. La película, considerada por muchos como una de las mejores de toda la saga y a la altura de las originales, arrancaba con un frenético rescate de Obi-Wan Kenobi y Anakin Skywalker al senador Palpatine, secuestrado por los Separatistas, el General Grievous y el Conde Dooku. En este prolongado primer acto, Anakin continuaba acercándose al Lado Oscuro al asesinar a sangre fría al Conde Dooku cuando este ya estaba derrotado.

Revelación de Palpatine como Lord Sith

Más adelante en la película, Palpatine desvelaba por fin lo que los fans de Star Wars ya intuían. Él era en realidad el malvado Lord Sith que llevaba causando problemas desde La amenaza fantasma. Su objetivo real es embaucar a Anakin y conseguir que el gran protagonista de Star Wars se uniera a él en el Lado Oscuro, derrotando definitivamente a los Jedi. Por eso le cuenta la tragedia de Darth Plagueis el Sabio, su maestro, para enseñarle que podría vencer a la muerte de Padme que él ha vaticinado. Este malévolo plan surte efecto pues, aunque Skywalker le delata, luego le ayuda a derrotar a los Jedi comandados por el Maestro Windu que van a detenerle.

Orden 66

La venganza de los Sith se va acercando a su final cuando llega uno de los momentos más duros y traumáticos de todo Star WarsObi-Wan Kenobi acaba de derrotar al General Grievous y muchos otros Jedi están repartidos por toda la galaxia en la ofensiva final de la República. Y, de pronto, los clones reciben un mensaje de Palpatine: «Ejecuten la Orden 66«. A continuación, los soldados se revelan contra sus generales sensibles a la Fuerza y los acribillan a casi todos sin piedad. Solo Obi-WanYoda y unos pocos más logran salir con vida. Y el punto y final lo pone Anakin, ya convertido en Darth Vader, que ataca el Templo Jedi de Coruscant junto a la Legión 501, asesinando incluso a los pequeños padawan que recuerdan a él en la primera película. La Orden Jedi ha caído y, con ella, la República, que se convierte en Imperio.

Palpatine recibe poderes supremos

Aprovechándose del ataque de los Jedi, Palpatine reclama al Senado poderes de emergencia para permanecer como Canciller Supremo y así acabar con la guerra y destruir a la Orden. A pesar de los intentos de Padme y otros senadores por evitarlo, finalmente el villano lo consigue. El personaje de Natalie Portman deja entonces una de las mejores frases de todo Star Wars: «Así es como muere la libertad, con un estruendoso aplauso».

Pelea de Obi-Wan vs. Anakin

Obi-Wan regresa a Coruscant para ver que es demasiado tarde. Su antiguo aprendiz se ha pasado al Lado Oscuro y ha ayudado a orquestar todo el ataque contra los suyos. Por ello, decide seguir en secreto a Padme, que quiere encontrar a su amado, lo que les lleva a Mustafar. Allí, maestro y aprendiz protagonizan la pelea más espectacular y dolorosa de Star Wars. De nuevo sonando el Duel of the Fates, Jedi y Lord Sith combaten, con un destrozado Kenobi ganando el asalto y dejando al mutilado Skywalker al borde de la muerte en la lava.

Pelea de Yoda vs. Palpatine

A la vez que los «hermanos» luchan a muerte en Mustafar, el Maestro Yoda decide enfrentarse en el Senado galáctico a Palpatine. Un duelo igualadísimo que, en esta ocasión, el Lord Sith termina ganando. Así, el Maestro Yoda acaba huyendo y marchándose al destierro autoimpuesto. El Jedi viajará hasta los bosques de Dagobah, donde le encontraríamos ya en Star Wars: Ep. V – El Imperio contraataca.

Final con Darth Vader, Luke y Leia

La venganza de los Sith termina con varios momentos paralelos que establecen el devenir de la galaxia Star Wars de cara a las películas originalesPadme da a luz a Luke Leia, pero muere por la profunda tristeza que siente por el camino que ha seguido AnakinObi-Wan decide llevarse al niño a Tatooine, donde su padre no le encontrará.

El senador Bail Organa adopta a la niña como su hija, de forma que los Sith no sepan que lleva los genes Skywalker. Y, mientras tanto, Darth Vader consuma su transformación al vestir al fin su legendario traje mecánico tras ser rescatado de Mustafar por Palpatine. Al enterarse de la muerte de Padme, exclama un desgarrador «¡NO!» que muestra el profundo dolor y remordimiento que el villano siempre sintió.

Gonzalo Franco