La pornografía tiene casi tantos defensores como detractores. En este marco, quizás te hayas planteado qué puede aportar y cómo puede afectar a las relaciones de pareja. Aquí te contamos sus principales efectos positivos y negativos.
Se considera pornografía al conjunto de representaciones escritas, pictóricas o audiovisuales que muestran desnudez o comportamiento sexual. Aunque tiene una larga historia, con la popularización de internet y dispositivos tecnológicos, su uso se ha disparado de manera exponencial, tanto para uso individual como en pareja.
Esta ha suscitado un gran interés entre investigadores procedentes de diferentes disciplinas. Entre ellas, una de las líneas que más repercusión tiene es el estudio sobre los efectos que tiene el consumo de pornografía a nivel individual y también sobre las relaciones de pareja.
La mayoría de estas investigaciones parten de la idea de que su uso afecta negativamente a la relación. Sin embargo, estudios más recientes que intentan partir de un punto más neutral, están encontrando resultados positivos.
Efectos negativos
Los expertos han encontrado que las parejas que no consumen pornografía presentan en general un mayor grado de ajuste entre los miembros mayor satisfacción y dedicación hacia el otro y una comunicación más positiva.
Sin embargo, esto parece variar en función de si es solo uno de los miembros quien la usa o si es algo compartido. En el caso de que sea uno solo de los miembros, suelen presentarse menores niveles de compromiso y mayor probabilidad de flirtear con otros e infidelidad.
Cuando la percepción de quien no lo usa es negativa, se ve afectada la autoestima, la calidad y satisfacción sexual. De hecho, en relaciones heterosexuales, se ha visto que algunas mujeres perciben como algo traumático, tanto como una infidelidad, que su pareja consuma porno.
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En un estudio reciente, sus participantes han indicado los siguientes aspectos negativos sobre su uso:
- Decremento en el interés hacia el sexo. Muchos indican que la pornografía ha provocado un menor deseo sexual hacia su pareja o falta de excitación para una relación posterior. En otros casos, incluso tienden a desear a su pareja como a un personaje pornográfico.
- Mayor inseguridad personal. Los participantes hicieron referencia a una disminución de su autoestima o de su nivel percibido de deseabilidad. Piensan que no son capaces de excitar tanto al otro como pudiera hacerlo el material pornográfico.
- Contribuye a tener expectativas irrealistas. Concretamente, tanto los usuarios como las parejas de estos, refieren que el porno afecta a lo pueden esperar en cuanto al aspecto físico, rendimiento en el acto sexual e incluso gustos.
Positivos
Las parejas en las que uno o los dos consumen porno pueden experimentar mayores niveles de erotismo y apetito sexual. Además, consideran que la pornografía puede actuar como:
- Fuente de información. Muchos aluden al valor educativo de este tipo de material. Ver pornografía puede aportar nuevas ideas y algo que disfrutar juntos. Además, ayuda a conocer qué gusta y qué no a uno mismo y a sus compañeros.
- Oportunidad para experimentar. Puede beneficiar a las parejas a la hora de aumentar el repertorio sexual, así como para normalizar la variedad, inspirar, fomentar la creatividad, y provocar un estado mental que predispone a la sexualidad.
- Mejora de la comunicación sexual. Supone una oportunidad para hablar con la pareja abiertamente sobre sexualidad, gustos y mejora la confianza. Hace la comunicación más fácil y promueve el entendimiento y aceptación de los deseos sexuales del otro.
- Fuente de placer. Principalmente la pornografía se entiende como entretenido, divertido, excitante. Así, se experimenta como una actividad placentera que hace que uno, o ambos, se sientan bien.
- Un ejercicio para la comodidad sexual. En mucho casos, las parejas perciben que el porno promueve la comodidad o autoaceptación de la propia sexualidad. Igualmente, ayuda a reducir la vergüenza, culpa o ansiedad hacia ciertos comportamientos sexuales, mejorando la sexualidad propia y de los demás.
Conclusión
La mayoría de estudios hacen referencia a los efectos negativos en parejas heterosexuales. En cambio, los propios usuarios suelen percibir que estos no existen. Lo que parece estar más o menos claro es que depende de la percepción de los miembros, sus actitudes y de si se usa de forma individual o en pareja, entre otras variables o factores.
También dependerá del nivel de comunicación de la pareja. Así, los que tienen una relación de menor calidad tenderán a experimentas más efectos negativos. Sin embargo otros, como se ha indicado anteriormente, ven una oportunidad para incrementar y mejorar la comunicación entre ellos. En definitiva, lo importante siempre será mantener un buen nivel de comunicación en la pareja y ser capaces de buscar el placer del otro y de uno mismo de la forma más saludable y honesta posible.
Este artículo ha sido escrito y verificado por la psicóloga María Vélez